XXI Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América y Tratado de Comercio de los Pueblos, ALBA-TCP
Palacio de la Revolución de La Habana, República de Cuba
Viernes, 27 de mayo de 2022
Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro
Buenas tardes a todos los compañeros presidentes y primeros ministros, cancilleres, jefes delegación de los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de nuestra América.
Hemos tenido una jornada previa de debate intenso, abierto, franco, sobre los caminos de nuestra América en esta etapa, los retos de nuestra América en esta etapa. Siempre en el espíritu del diálogo entre iguales, diálogo entre iguales, como es el espíritu que nos mueve en América Latina y el Caribe, el espíritu entre hermanos y hermanas, entre iguales, que somos capaces de debatir con franqueza todos los temas, todos los temas de la agenda regional, subregional, de la agenda mundial, de la geopolítica en general.
El ALBA tiene ya un patrimonio, tiene una doctrina clara de lo que es nuestro relacionamiento, y además el ALBA puede mostrar a los organismos multilaterales, a las cumbres, a las reuniones, resultados concretos de lo que ha sido nuestra agenda de trabajo desde que fuimos fundados aquel 14 de diciembre del 2004. Ya este año cumplimos 18 años, ¿verdad? Mayoría de edad, estamos a las puertas de los 20 años y podemos mostrar una doctrina unionista, bolivariana, latino-americanista, caribeña, de países, de gobiernos y de pueblos que nos unimos entre iguales, vis a vis, y nos vemos los ojos de frente con afecto y con amor, donde nadie se considera el hegemón, el dominante, el que ordena, el que pone, el que quita, el que incluye, el que excluye. No. Iguales.
Hemos visto en el transcurso de estos años expandirse el concepto de unión, de igualdad, de fraternidad, de la doctrina latinoamericanista caribeña aquí en el siglo XXI. Hemos visto el nacimiento y la consolidación de la Comunidad de Estados Latino-americanos y Caribeños que es nuestra comunidad, es nuestro espacio. En ese orden nosotros, bueno hemos tenido un buen debate con ese legado, con ese patrimonio, hemos debatido sobre la convocatoria errática de la llamada Cumbre de las Américas en Los Ángeles.
Decimos convocatoria errática porque se ha pretendido y se pretende excluir de esa reunión en Los Ángeles, que se autodenomina Cumbre de las Américas, excluir a los pueblos de Nicaragua, Cuba y Venezuela. Hemos confirmado en el transcurso esta semana, el enorme poder que tiene la conciencia latinoamericana y caribeña, la protesta general de los gobiernos, países y pueblos de América Latina al pretendido proceso de exclusión de los pueblos de Nicaragua, Venezuela y Cuba. Hemos visto cómo surgen las voces del Caricom, de manera unida y contundente, 14 gobiernos del Caricom, nuestros hermanos del Caribe. Tenemos que darles las gracias a nuestros hermanos del Caribe, a los 14 gobiernos por su voz valiente, clara y contundente de protesta contra la pretensión de excluir a tres pueblos de nuestra América: Venezuela, Cuba y Nicaragua.
Igualmente hemos visto voces firmes y valientes como la del presidente Andrés Manuel López Obrador de México, México lindo y querido, que se ha plantado a levantar la voz de la verdad, de la moral, de la dignidad de todo un continente. México nuestro hermano mayor, México, le agradecemos al presidente Andrés Manuel López Obrador por ir al frente de esta jornada en defensa de la verdad, de la unión, de la confraternidad, del debate democrático y en contra de la exclusión.
Hemos visto voces sólidas, valientes como la de la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, la de nuestro querido presidente aquí presente Lucho Arce y la de gobiernos de todo el continente que, con distinta tonalidades y énfasis han sido contundentes y claros en condenar la exclusión a los pueblos de Venezuela, Cuba y Nicaragua.
Así que la voz del continente resuena, retumba en conciencia y eso nos debe llenar de alegría. Ha valido la pena, toda la lucha de varias generaciones de latinoamericanos y caribeños por levantar las banderas de la dignidad y de la unión latinoamericana y caribeña. Nuevos y mejores tiempos vienen para nosotros, nuevos y mejores tiempos vienen para los pueblos de América Latina y el Caribe. Y esos tiempos vendrán y surgirán de estas batallas que hoy damos porque se respete a nuestro continente, porque se respeten a nuestros pueblos.
Venezuela da una batalla como lo decía el primer ministro Roosevelt Skerrit, heroica. Recientemente han salido de los Estados Unidos de Norteamérica testimonios escritos en libros del ex secretario de Seguridad John Bolton, de la era Trump, del ex secretario de Defensa Mark Esper, de la era Trump, donde divulgan allí ya fuera de sus cargos, los planes que se desarrollaron para agredir a nuestra patria. Los planes de invasión militar directa. Los planes de invasión militar con mercenarios contratados en la Florida y en Colombia. Los planes para tratar de buscar un conflicto armado, una guerra con Colombia, encabezado por el narco paramilitar que ha sido presidente de Colombia en estos años, Iván Duque. Los planes de la guerra económica contra la moneda. Los planes de la persecución contra la industria petrolera, contra la economía en general, cómo nos han robado miles de millones de dólares; nos robaron la empresa Citgo, valorada en más de 12 mil millones de dólares. Una empresa con 8 mil estaciones de gasolina, 6 refinerías en los Estados Unidos, que es propiedad de Venezuela, es propiedad del pueblo de Venezuela; robada, secuestrada.
Han salido todos los planes para intentar asesinarme, gracias a Dios y a la Virgen que estoy protegido, estamos protegidos, y estamos vivos, de pie, enteros y victoriosos. Gracias al esfuerzo, hemos resistido, primer ministro Roosevelt Skerrit, y hoy Venezuela sale en ritmo de recuperación, en clave de recuperación integral, económica, social, política, moral; y esa Venezuela en ritmo de recuperación no la excluye nadie. La voz de Venezuela retumbará junto a la voz de Cuba, la voz de Nicaragua y la voz del ALBA en la reunión de Los Ángeles. Y serán los pueblos humildes, los pueblos de a pie quienes llevarán nuestra bandera allá a Los Ángeles, nada ni nadie podrá detenerlo, es la verdad.
Hemos compartido en el seno del ALBA, una declaración que hemos aprobado de manera unánime, una declaración contundente sobre estas circunstancias lamentables de un imperio que pretende por la intriga, por la mentira, por el engaño, por la amenaza, dividir la región. Y debe saber este imperio decadente de los Estados Unidos que ni la intriga, ni la amenaza, ni el engaño, hoy son armas que puedan intimidar la voluntad y la dignidad de América Latina y el Caribe, que se va a expresar de aquí a la llamada Cumbre de las Américas y mucho más allá.
Quiero también aprovechar esta tribuna de la Alianza Bolivariana para los pueblos de nuestra América para agradecer las declaraciones valientes del presidente de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, el presidente argentino Alberto Fernández, desde aquí le mandamos el agradecimiento del pueblo humilde de Venezuela, del pueblo valiente y trabajador de Venezuela, de los pueblos de la Alianza Bolivariana para los Pueblos Nuestra América; y sabemos que su voz firme, clara y valiente va a ser una de las voces más poderosas para cuestionar la exclusión y el intento de división de América Latina y el Caribe, con esta política errática del gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica. Valiente posición del presidente Alberto Fernández, quien hoy es el presidente de América Latina y el Caribe está al frente de los destinos, de lo que ha dicho el presidente Comandante Daniel Ortega: Los destinos de lo que es nuestro camino real.
No perdamos la perspectiva jamás, el siglo XXI es nuestro siglo, es el siglo de América Latina y el Caribe, es el siglo de la unión y la liberación de todo un continente, este es nuestro siglo. Ya es suficiente de los siglos de expoliación, de invasiones, de amenazas, de hegemonismo imperial, ¡este es nuestro siglo! El siglo XXI y nuestro camino es este América Latina y el Caribe, el ALBA, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, este es nuestro camino, el camino de los iguales, el camino del respeto, el camino de la inclusión, el camino de la convocatoria unitaria, ese es nuestro camino.
Y aquí desde La Habana, Cuba, en el seno de esta cumbre número XXI, Venezuela ratifica plenamente como pueblo revolucionario su compromiso con el camino de la unión y la liberación del continente.
Muchas gracias, querido presidente Miguel Mario Díaz-Canel, gracias.