Stephen Sefton, Tortilla con Sal, 29 de mayo 2021
El artículo de Tomas Andino Mencia "¿Qué pasa en Nicaragua? Un enfoque desde la izquierda crítica" apareció en el sitio web Rebelión en abril 2018, apenas a una semana del estallido del fallido intento de golpe de estado de aquel año.
Lo comento ahora porque el autor ofrece un decálogo de mentiras que constituye un especie de credo para las personas que apoyan la oposición fascista en Nicaragua y que intentan plantearlas en base a falsos argumentos pseudo-radicales. El escritor Pablo Jofre Leal refiere a este texto de Tomas Andino Mencia en su reciente artículo “Washington: nuevo intento de derrocar al gobierno nicaragüense”.
Lo fundamental es que Andino Mencia asevera con toda la confianza e ignorancia del mundo que el fallido intento de golpe de 2018 fue iniciado por un movimiento que “fue auto convocado por sectores progresistas, de la juventud universitaria como se ha dicho. El análisis para que sea objetivo, tiene que basarse en la realidad.”
Habría sido bueno si Andino Mencia hubiera tomado su propio consejo, porque su decálogo demuestra que no sabe nada de la realidad de Nicaragua en Abril 2018
La extremada violencia de las protestas de Abril 2018 empezó a cobrar vidas el día jueves 19 de abril con el asesinato en diferentes incidentes de un policía sandinista, de un trabajador municipal sandinista y de un joven transeúnte que no fue involucrado en las protestas. A pesar de las vergonzosas tergiversaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, está claro que los tres murieron a manos de activistas de la oposición golpista. Nadie murió el día miércoles 18 de abril 2018 aunque los golpistas hicieron circular el falso rumor que la policía había matado un estudiante, la cuál es una completa mentira. Los intensos ataques del 19, 20 y 21 de abril contra Alcaldías Municipales en muchas ciudades, contra oficinas del FSLN, contra escuelas, mercados y casas particulares de sandinistas, fueron planificados, instigados y ejecutados por los sectores mas reaccionarias de la oposición política de la derecha nicaragüense a las cuales se aliaron también los amargados ex-sandinistas como Dora Maria Tellez, Vilma Nuñez de Escorcia, Carlos Fernando Chamorro y Monica Baltodano entre muchos más.
El inicial apoyo estudiantil evaporó rápidamente dentro de un mes, porque la opinión estudiantil en general podía ver que la dirigencia del fallido intento de golpe representaba una guerra de clase contra ellas y ellos. El caso de Leonel Morales es emblematico de qué pasó en ese tiempo cuando pandillas criminales tomaron control de la Universidad Politécnica y de la Universidad Nacional Autonoma de Nicaragua con el apoyo de activistas del Movimiento Renovador Sandinista y sus ONGs como CENIDH, dirigida por Vilma Nuñez de Escorcia, y Popol Nah, la ONG de Monica Baltodano, entre otros y también con el apoyo de la Iglesia Católica.
Vale la pena revisar el decálogo de mentiras de Tomas Andino Mencia porque explica mucho de por qué muchas personas en América Latina y el Caribe no tienen la menor idea de la realidad nicaragüense
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Andino Mencia caracteriza el Movimiento Campesino como un movimiento con amplio respaldo popular lo cuál es falso. Apenas cuenta con el apoyo de dos mil personas en su zona principal de operación, en las zonas de Nueva Guinea y Rio San Juan. Para comparación, la Asociación de Trabajadores del Campo, que apoya al gobierno sandinista, tiene una membresía de más de 45,000 campesinos, un verdadero movimiento nacional Los líderes del Movimiento Campesino en 2018, Medardo Mairena y Francisca Ramirez, son violentos criminales cómo se consta en estas entrevistas con más de 25 personas quienes fueron víctimas de la violencia del Movimiento Campesino en 2018.
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Alega que la minería ocupa alrededor de 22% del territorio nacional. De hecho las operaciones de los cuatro empresas mineras en Nicaragua ocupan alrededor de 1% del territorio nacional. Lo que sí es cierto es que alrededor de 20% del territorio nacional se ha concedido para la exploración de posibles depósitos minerales, que para nada implica la explotación de esa gran extensión territorial. Además, la minería en Nicaragua tiene características muy diferentes a la de otros países, ya que gran parte de la actividad minera es artesanal, regulado bajo acuerdos ambientales entre los obreros mineros, las empresas que compra materia prima de ellos y las autoridades locales y nacionales.
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Argumenta que los monocultivos de palma africana y azúcar y la actividad ganadera han quitado tierras a la población campesina. Esto es completamente falso. Nicaragua tuvo una reforma agraria profunda en la década de los 1980s de que la redistribución de las tierras en su mayor parte sobrevivió el período de los gobiernos neoliberales desde 1990 hasta 2006. Desde 2007, el gobierno ha profundizado la democratización de la economía rural de tal manera que el impulso principal de la migración campesina es el cambio climático que desplaza las familias de zonas áridas, especialmente del corredor seco del país en el occidente, donde es cada vez más difícil para pequeños productores de sostener el cultivo de granos básicos y otras actividades agropecuarias.
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Repite la falsa propaganda opositora que el gobierno no cuida el medio ambiente basándose en la burda mentira que no se atendió al incendio de 2018 en la Reserva Biosfera de Indio Maíz. Se demuestra la falsedad de esta tonta acusación aquí, aquí, aqui, aqui, aqui, aqui, aquí y aquí.
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Alega que el gobierno reprimía a las organizaciones no gubernamentales, a pesar de los abiertos abusos por estas organizaciones de su estatus aún antes del fallido intento de golpe de estado de 2018 en que no pudieron esconder su clara complicidad y protagonismo en ese intento de derrocar el gobierno. Todas estas organizaciones fueron financiadas y respaldadas directa o indirectamente por los gobiernos de los Estados Unidos y sus aliados europeos.
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Vuelve a revivir la falsa acusación que Presidente Ortega violó la constitución a presentarse como candidato en las elecciones de 2011 y 2016. Fue precisamente la alianza en 1994 de los socialdemocratas ex-sandinistas con la extrema derecha que violó la Consitución con una reforma no consultada con el pueblo la cual prohibió la re-elección. Entrevistas con la presidenta de la Corte Suprema y con el presidente del Consejo Supremo Electoral, o en este video aquí, explican como en 2010 la Corte Suprema sencillamente devolvió a la Constitución Política de Nicaragua de 1987 su integridad, al declarar inaplicable la anti-democrática reforma oportunista de 1994.
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Insiste en considerar fraudulentos los resultados de las elecciones de 2011 y 2016 a pesar de que ambos fueron reconocidos como legítimos por neutrales observadores electorales extranjeros y, a pesar de algunas reservaciones en relación a aspectos técnicos, por la OEA y la Unión Europea. Los resultados también reflejaban datos muy similares a prácticamente todas las encuestas de opinión anteriores a los comicios.
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Inventa una inexistente represión de los medios de comunicación en Nicaragua por la Vice Presidenta Rosario Murillo cuando en todo momento y hasta ahora la oposición controlaba los periódicos nacionales, varios canales nacionales de televisión y radio, y la mayor parte de los medios locales de televisión de cable y radio.En Nicaragua se da la risible situación en la cual, desde 2007 hasta la fecha, los medios de comunicación de la oposición política del país han alegado constantemente que están sujetos a una dictadura a la vez que siguen emitiendo y publicando ataques odiosos y falsos contra el gobierno en general, contra sus ministros, contra la Policía Nacional y el Ejército de Nicaragua y contra el Presidente Daniel Ortega y la Vice Presidenta Rosario Murillo. Solamente personas que no saben nada de Nicaragua tragan esa absurda mentira.
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Recicla otra vez la gran mentira de corrupción a gran escala por parte de dirigentes sandinistas cuando el gobierno del Presidente Ortega es reconocido por todos las instituciones financieras internacionales entre los gobiernos más eficientes y honestos en la ejecución de financiamiento de programas y proyectos.
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Finalmente Tomás Andino Mencia refiere a la decisión del Consejo Superior de la Empresa Privada de romper el sistema de acuerdo nacional consensuado con los sindicatos y el gobierno, pero omite a admitir que la ruptura de relaciones se dio por motivo de la insistencia del gobierno que la empresa privada asumir una parte justa del financiamiento del sistema de seguro social. Quizás en algún momento las y los prepotentes ignorantes que siguen todavía hablando pura paja de la propuesta reforma del seguro social en Nicaragua de 2018 tomarán la molestia de leerla. Se darán cuenta, entre muchas cosas más, que la reforma buscó defender los derechos de los obreros al seguro social limitando el aumento de su aporte a 0.7% de su salario mientras exigía más de 3% de parte del la empresa privada y ofrecía cobertura completa en el sistema de salud del seguro social a las y los pensionados jubilados financiada de manera simbólica con un aporte de 5% de su pensión.
En breve, el decálogo de Tomás Andino Mencia es un excelente resumen de las principales mentiras difundidas por la oposición fascista en Nicaragua y sus aliados ex-sandinistas. Si se quiere tomar el antídoto, hay que empezar por leer los siguientes materiales: